
“No había lugar para ellos en la posada”
Una de las dudas más recurrentes que se genera en nuestros y nuestras participantes a la hora de ser derivados a los trabajadores sociales de la Fundación es ¿qué es el Trabajo Social? Como decía Druker: “el trabajo social siempre busca el cambio, responde a él, y lo utiliza como oportunidad.
Inma, José Vicente y Claudia son nuestros Trabajadores sociales. El servicio de atención social que ellos coordinan es un recurso especializado asociado a todos los proyectos y participantes que ofrece orientación y soporte a las familias de manera complementaria a la intervención educativa que se realiza, acompañándolos en las gestiones del día a día y coordinándose con otros agentes sociales.
En este artículo queremos tratar, uno de los problemas más graves y difíciles de solucionar que es el problema de la vivienda en España y más concretamente en Torrent, no es una asunto de que no haya suficientes casas, o que no se puedan construir más, sino que muchas personas o familias no pueden tener acceso a una vivienda digna, ni tan siquiera a una habitación de alquiler. Y en el caso de que lo puedan hacer, o son viviendas que están en malas condiciones o tienen que hacer enormes sacrificios económicos.
Se podría pensar que esta situación afecta a poca gente, o solo a personas pertenecientes a colectivos vulnerables, pero escuchamos y vemos en nuestro círculo de amistades, familiares, que no es cosa de “poca gente”, o de las personas marginadas, excluidas,… si no de cada vez más personas se ven afectadas por el problema de la vivienda.
Entre las causas de ello, escuchamos que es por culpa del estallido de la burbuja inmobiliaria, por los desahucios, por el paro, por la guerra de Ucrania, el COVID, los okupas,… y así, infinidad de motivos, que año tras año se añaden y que lo único que vemos es que la perjudicada una vez más, es la población en general.
Si hace aproximadamente 15 o 20 años, el precio de la vivienda se consideraba razonable que estuviera alrededor de cuatro veces el salario, en estos momentos, los datos dicen que la ratio euros/metro cuadrado está sobre un 170%, incluso en algunas ciudades más del 230% por encima del valor de referencia.
Para que te hagas una idea de los altos precios que se están cobrando, hay personas que están pagando más de 300 € al mes por una habitación para 2 personas, más gastos de agua, electricidad, gas,… Imagínate lo que están pidiendo por el alquiler de una vivienda.
Como decíamos, todo ello provoca graves consecuencias sociales, familiares, económicas… entre las que hemos podido detectar las siguientes:
- Desahucios tanto hipotecarios como por impago del alquiler.
- Imposibilidad de que la población joven se emancipe. Los y las jóvenes que lo hicieron antes, han tenido que regresar a casa de sus padres y madres.
- Convivencia de varias familias en la misma casa, con la consiguiente multiplicación de los casos de hacinamiento, hasta el alquiler de habitaciones e incluso balcones para dormir.
- Okupación de viviendas que se encuentran vacías.
- Las miles de casas y edificios a medio terminar y con la obra parada que hay por todas las ciudades lo que conlleva un aumento del desempleo en el sector.
- Problemas de convivencia entre vecinos, convivientes, , rupturas familiares, enfermedades mentales como la depresión, el estrés, las adicciones,…
Estas y otras situaciones son con las que nos encontramos diariamente en el Servicio De Atención Social del Centro Laura Vicuña.
Nos resulta tan difícil decir a las familias que atendemos: “no podemos ayudarte”, “no tenemos recursos de alojamiento adecuados para ti”, “vamos a intentarlo pero es muy difícil por no decir imposible”…
Y ¿Cómo se podría “solucionar” este enorme y grave problema? ¿Qué deberían hacer los organismos oficiales, las entidades, la clase política,…?
Se habla de muchas posibles soluciones, pero…
¿Y tú? ¿ Y nosotros? ¿Qué podemos hacer como centro?