
Con la Auxiliadora cerca de las personas llevando esperanza
Nuestra fundación tiene un nombre muy salesiano, pero ¿de dónde viene? ¿por qué nos va muy bien como entidad social?
Sabemos que María de Natzaret, a lo largo de la historia de la Iglesia y de la devoción de las personas creyentes ha tenido y tiene muchos nombres, cada uno de ellos señalando una característica importante de la persona de María que les ayudase en su camino de fe y en las cosas de cada día.
Don Bosco, gran educador de los jóvenes más pobres que vivían en Turín a mediados del siglo XIX, fue quien impulsó la devoción a María Auxiliadora. Para proponer de modelo a sus jóvenes podía haber recurrido a la Virgen Inmaculada, que era la advocación utilizada en aquel momento, pero él sabía que sus muchachos necesitaban algo más.
María Auxiliadora fue para los chicos del oratorio de Turín y para los primeros salesianos, no solo la presencia de una madre que acompaña en el camino y en las luchas de cada día, fue también una protección y un refugio seguro desde el que poder avanzar. La gran confianza en María hizo que Juan Bosco pudiera realizar cosas verdaderamente sorprendentes a los ojos humanos: rescatar de la pobreza y de la marginación a muchos jóvenes y darles una educación y un futuro que nadie les aseguraba.
María Auxiliadora se convirtió para los jóvenes y para toda la Familia Salesiana, en la Virgen de Don Bosco, en aquella que podía ser invocada porque siempre iba a estar de nuestra parte en los momentos difíciles. Tan dentro llevaba Don Bosco esta devoción que en 1863, y con un capital inicial de cuarenta céntimos, comienza la construcción de la iglesia dedicada a ella en Turín. A partir de ese momento, María Auxiliadora no será solo para los salesianos o las salesianas, sino para toda la humanidad. Y de la mano de María Mazzarello, en 1872 fundó el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora (salesianas) que iba a ser y es un monumento vivo a María Auxiliadora.
Si Don Bosco viviera hoy nos diría que seguimos viviendo tiempos recios, momentos complejos, y que:
- María Auxiliadora sigue siendo un ejemplo a seguir, un refugio en el que descansar, una fuerza que nos acompaña en nuestro camino.
- María Auxiliadora sigue al lado de los pobres, de las personas que luchan y que sufren, alentando la esperanza, empoderando posibilidades y venciendo dificultades.
- María Auxiliadora sigue apostando por la vida y la dignidad de las personas, por las cosas sencillas, por el amor llevado al extremo hasta dar la vida.
En la fiesta de María Auxiliadora que celebramos cada 24 de mayo, renovamos nuestro compromiso de ser personas y proyectos sociales que auxilian:
- Porque ofrecemos apoyo y ayuda a quienes más lo necesitan.
- Porque buscamos el bien y la dignidad de los que menos tienen y de los que más están sufriendo.
- Porque luchamos al lado de las personas contra las injusticias de la sociedad.
- Porque creemos en cada persona y hacemos todo lo posible para que puedan tener una vida plena y feliz.
- Porque alentamos a vivir con esperanza las situaciones difíciles de la vida.