
Un verano intenso y emocionante en la Llar les Vinyes
Queremos compartir con todas y todos vosotros el ambiente que se respira día a día en la Llar y como acompañamos, en esta misión apasionante, este verano lleno de vida y de nuevas experiencias para todos aquellos niños y niñas que por tantos motivos viven en esta casa que quiere ser para ellos una gran familia.
La jornada comienza al despuntar el día a las 7 de la mañana con los educadores/as animando a los dormilones/as a levantarse y prepararse para ir a los diferentes casales donde, gracias a mucha generosidad y apoyo, los hemos podido apuntar este verano; pues el no haber podido acceder a becas, ha dificultado que muchos de ellos no hayan podido participar durante el mes de julio en las actividades.
Unos van a casales del Ayuntamiento de Cerdanyola, pudiendo coincidir con amigos/as de la escuela, otros van a clubes de poblaciones cercanas al municipio, lo cual les aporta hacer nuevas amistades. Los adolescentes asisten a la entidad Super Acció, donde cada día se trasladan hasta Barcelona en transporte público, lo cual les otorga el papel de mayores y les ayuda a crecer y manejarse en nuevas situaciones. Otros pasan unos días fuera participando en campos de trabajo, donde se crea un inmejorable espacio educativo y de crecimiento personal a través de la acción y del servicio a la comunidad. Este es el nivel de actividad que se vive durante las primeras horas de la mañana en nuestra casa.
Y luego viene el periodo de tarde, donde desde la Llar organizamos diferentes actividades para los tres grupos de edad, dando respuesta a las necesidades de pequeños, medianos y grandes. Y así, cada día hay actividades diferenciadas para cada uno de estos grupos: piscina, playa, excursiones, talleres, etc. El verano se nos está pasando volando, pues estamos siempre en movimiento. Los chavales a veces se quejan de tanta dinámica, sobre todo los adolescentes, con lo cual tienen algunas tardes libres para poder salir y descansar. Un día por semana el grupo de adolescentes participa de una asamblea donde ellos deciden la playa a la cual quieren ir, el lugar donde ir a hacer la Vía Verde, que es un día entero de excursión, etc. También se reserva un espacio de la asamblea para poder colocar sus quejas, sus dudas, sus propuestas, sus iniciativas…
Como tal vez todos/as sabéis, la Llar es muy grande. Es la casa de 40 niños, niñas y adolescentes de entre 3 y 17 años. Se promueve que puedan pasar unos días con sus familiares, aunque no siempre es posible, y el número de niños/as es bastante elevado, por lo que requiere de mucha organización, diálogo, motivación y ganas, y de eso no falta en el equipo educativo. Los educadores/as se sienten partícipes de la obra y creen en ella y, por encima de todo, se quieren a los chavales. La creatividad, motivación e ilusión caracteriza la manera de hacer del equipo, que se implica para cuidar cada momento de los chavales.
Los martes realizamos una reunión de coordinación para poder retomar la semana vivida y reconducir lo que sea necesario para mejorar el funcionamiento de la siguiente. También damos importancia a dedicar un espacio para hablar de los niños/as y poner la mirada en las particularidades de los procesos que cada uno de ellos/as, así como en el de sus familias. Estas coordinaciones tienen como objetivo ir todos/as a una en la intervención educativa.
Se nos olvidaba que a finales de julio los mayores se van de vivac, unas pequeñas colonias que organizan los educadores/as responsables de la actividad. Este año irán a Sueca, donde la comunidad Salesiana nos ha abierto sus puertas para poder pasar unos días disfrutando de sus tierras. Durante el mes de agosto realizamos dos turnos de colonias de 10 días: En un primer turno marcharan los pequeños y al volver éstos marcharan los mayores. Y justo antes de empezar el nuevo el curso escolar toca el turno de vivac para el grupo de pequeños.
Y así de intenso y emocionante es el verano en la Llar Les Vinyes.
No sé si habéis tenido la oportunidad de tener en vuestras manos el libro de Eduard Sala Va de Vida. Nosotras sí, y ¿sabéis? Podría decir que la LLAR va de vida, de vida diaria vivida con intensidad, fuerza, fragilidad, cansancio, lucha, amor, pero sobre todo una vida llena de mucha esperanza. Es genial ver a los chavales sonreír y reír, disfrutar con los patines y las bicicletas, con los juegos de agua en el patio, observar sus caras de felicidad al ver salir al educador/a con una bolsa llena de refrescantes polines para repartir, y tantas otras situaciones donde la esencia estival inunda la Llar.
Y así es la vida, una oportunidad que no debemos dejar pasar y en la cual tenemos la gran responsabilidad de ayudar a crecer, a experimentar, a vivir con intensidad cada momento de nuestros chicos/as que son una bendición de Dios.
Con una frase de Don Bosco queremos acabar este pequeño encuentro con vosotros/as «Mi único deseo es veros felices en la tierra y en el cielo». Así es como intentamos vivir el verano y cada momento en la Llar, buscando aquello con lo que podamos hacer felices a los chicos y chicas.
Un fuerte abrazo de vuestros/as amigos/as de la Llar Les Vinyes, vuestra casa. ¡Feliz verano!