
Terminamos el encuentro formativo para educadores y educadoras
El 27 y 28 de febrero tuvo lugar el último encuentro formativo Acompañar en el proceso de educación afectivo-sexual: fundamentos y claves biológicas ofrecido a los equipos educativos de las diversas delegaciones de la Fundación María Auxiliadora, y con el que se pone el cierre a los encuentros formativos de este año 2023.
María José Silva y Auxiliadora Gómez, formadoras y dinamizadoras del encuentro, nos presentaron, a los equipos educativos, nuevos conocimientos y nociones básicas para acompañar a las personas participantes de los proyectos sociales en el ámbito afectivo-sexual, un ámbito importante pero donde todavía hay mucho por aprender.
En el encuentro hubo espacios de teoría, y de conceptos biológicos, pero también se fomentaron la participación y los debates entre los diversos equipos. Temas como la diversidad sexual, el género, la orientación y el afecto, entre otros, nos dieron pie a crear debates enriquecedores donde compartir experiencias y aprender a acompañar a las personas participantes de manera holística e integradora.
Al final de estas jornadas nos presentaron el Itinerario Afectivo-Sexual (IAS), diseñado por diferentes profesionales, donde se encuentran las formadoras y el compañero Sergio Campos de la delegación de Torrent. Este itinerario está dividido en diversos bloques donde se tratan los temas biológicos, culturales, sociales y psicológicos, siempre de manera transversal para llegar a ofrecer una atención de calidad teniendo en cuenta todos los aspectos de la persona.
Para finalizar, cabe añadir que el encuentro dejó una semilla en todos los participantes, que terminaron con ganas de seguir aprendiendo sobre el tema y poder trasladar a los equipos la importancia de tratar de manera holística y global el ámbito afectivo-sexual, para así poder seguir optando por un modelo preventivo, clave en nuestra intervención educativa.

Seguimos con la formación. Programar: de las necesidades a los objetivos
Durante los pasados jueves 23 y viernes 24 se desarrolló la formación Trabajar objetivos, medir resultados. Programar: de las necesidades a los objetivos con la presencia de un nutrido grupo de participantes provenientes de las diferentes delegaciones de la Fundación María Auxiliadora. A todos nos unía el deseo de mejorar nuestras capacidades profesionales desde el mismo momento en que iniciamos el diseño de un proyecto o una actividad ya que, aunque pueda parecer una fase tediosa y poco atractiva, la programación es la raíz de una labor que quizás nos permita recoger los frutos que deseamos.
De esta manera, de la mano de la formadora Marta Colomer, conocimos la estructura que debe tener una buena programación. Para ello debemos tener claro cuáles son las necesidades de los usuarios de nuestros proyectos y, como anuncia el título de la formación, a partir de éstos ser capaces de marcar unos objetivos a trabajar por medio de diferentes actividades para, por último, medir con los indicadores si se ha cumplido lo que preveíamos y evaluar las posibilidades de mejora si es necesario.
Uno de los puntos fuertes de las sesiones fue la metodología y la actitud de Marta Colomer y es que favoreció en todo momento la participación, el planteamiento de dudas, el diálogo y el carácter práctico mediante el trabajo de los conceptos tratados en pequeños grupos compuestos por miembros de las diferentes delegaciones. Por medio de los casos planteados pudimos poner sobre la mesa los conocimientos y las rutinas adquiridas que traíamos de antemano y entender mucho mejor el sentido que debe tener una programación en cada una de las partes que la integran y en su conjunto. Además, pudimos conocernos más y compartir información sobre las experiencias y prácticas de cada uno de los proyectos, lo cual también es un valor añadido en este tipo de formaciones.
En definitiva, el grado de satisfacción y aprendizaje fue muy alto y nos fuimos con un buen sabor de boca y las ganas de repetir al año que viene. Además, mejoró nuestra imagen de la planificación como elemento indispensable en nuestra labor socioeducativa ya que, como todo cuadro necesita primero de un estudio de las formas, las proporciones, etc. también toda actividad o proyecto necesita de una buena programación, lo que nos conecta con las palabras de Don Bosco: «Vosotros completaréis la obra que yo empiezo: yo hago el boceto, vosotros pondréis los colores«.